En el día de ayer, la Misa de Réquiem
estuvo presidida por el nuevo Libro de Difuntos de la Hermandad.
Se trata de una obra encuadernada
en piel de color negro en cuya portada destaca una reproducción de una pintura
de Cristo crucificado, del pintor barroco sanluqueño Francisco Pacheco, sobre
una cruz de imitación a carey y orfebrería escoltadas por un Alfa y Omega.
En su interior se disponen
reproducciones de bellos grabados del gran artista del renacimiento alemán
Alberto Durero como la Resurrección de Jesucristo, Cristo Resucitado liberando
a las Animas Benditas del purgatorio y la Asunción al cielo en cuerpo y alma de
la Santísima Virgen. También del mismo autor son las reproducciones de los
grabados que hacen referencia a nuestros Sagrados Titulares, es decir, de
Cristo flagelado, de los Siete Dolores de la Santísima Virgen y la Gloria de
María con Jesús rodeada de Todos los Santos.
En su interior también está
reflejado el Salmo XXIII "El Señor es mi Pastor nada me falta..." y
la lectura del Evangelio Según San Juan "Yo soy la Resurrección y la vida;
el que cree en mi aunque muera, vivirá y todo el que vive y cree en mí no morirá
jamás".
Una gran obra llena de simbolismo
donde están y estarán los nombres de todos nuestros hermanos difuntos.